¿Quién iba a pensar que un pastel mal colocado casi destruye la escena más romántica de «Titanic»? 🎂🚢
Estamos en 1996, en el majestuoso set de «Titanic». James Cameron, conocido por su atención al detalle, dirigía la famosa escena del baile en tercera clase, donde Jack y Rose descubren la libertad lejos de las pomposas restricciones de la alta sociedad. Todo estaba perfectamente coreografiado hasta que un dulce pero inoportuno percance amenazó con hundir más que el barco. 💃🕺
🎬 La escena que nadie escribió
En plena filmación de esa escena de baile, justo cuando Jack (Leonardo DiCaprio) debía levantar a Rose (Kate Winslet) en un giro romántico, un pastel de frutas estratégicamente olvidado en el set entró en acción. Al dar el paso final, DiCaprio pisó el pastel, resbalando inesperadamente y, en un acto reflejo, agarrándose a Winslet para no caer. Ambos cayeron al suelo entre risas, interrumpiendo la toma con una explosión de risas y un desorden de pastel por todos lados. 🎂😂
«Fue como si el pastel dijera: ‘¡He llegado para hacer historia!’ Nunca vi a un postre ser tan protagonista.» – Comentario jocoso de un miembro del equipo de rodaje.
🎥 Cuando el error se volvió leyenda
El incidente del pastel se convirtió en una anécdota legendaria en el set, provocando carcajadas cada vez que se mencionaba. Cameron, siempre el perfeccionista, decidió que el humor del accidente era demasiado bueno para ignorarlo, así que lo convirtió en un momento de blooper en los extras del DVD, donde fue atesorado por los fans. La historia del pastel «intruso» circuló ampliamente, dejando a los seguidores de la película con una dulce sonrisa y nuevas perspectivas sobre la grabación de esa épica escena. 📀🛳️
El tropiezo con el pastel fue más comentado en los encuentros de fans que algunas de las escenas más dramáticas. ¡Nunca antes una pieza de repostería tuvo un rol tan crucial en una película! 😄🎥
🎁 Dato para soltar en cualquier conversación:
En «Titanic», un pastel olvidado en el set provocó una caída memorable en la escena de baile de Jack y Rose. ¡¿QUÉ?!